Estamos dentro del mes bucodental. Por eso os queríamos hablar de una enfermedad que aunque no es muy común puede llegar a ser muy grave. Sin embargo, evitarlo no es muy complicado. Se trata de la periodontitis. Se trata de una inflamación e infección de los ligamentos y huesos que sirven de soporte a los dientes.
¿Que es?
La periodontitis es una complicación de la gingivitis, cuando esta no se trata las encías se inflaman todavía más y se produce una infección e inflamación que va desde las encías hasta los ligamentos y hasta el hueso. Por culpa de esta pérdida de soporte donde está anclado el diente, este comienza a aflojarse y hace que finalmente lleguen a caerse.
Se trata de una de las enfermedades más comunes por las que se caen los dientes en los adultos. Aumenta su frecuencia según va aumentando la edad del paciente, aumentando en la adolescencia. Es ocasionada por la placa y el sarro que se va acumulando en la base de los dientes. Debido a la inflamación hace que entre sarro y placa entre la encía y el diente produciéndose la infección, dañando el tejido y el hueso alrededor del diente.
¿Cuáles son los síntomas?
Entre los síntomas más habituales de la periodontitis podemos incluir: mal aliento, encías de color rojo brillante, encías sangrantes y que son sensibles al tacto, los dientes están flojos y las encías inflamadas.
¿Cuál es el tratamiento?
El tratamiento suele ser reducir la inflamación, intentar eliminar las bolsas que se producen en las encías y tratar las enfermedades periodontales que pueda haber. Es de vital importancia mantener una correcta limpieza dental, son indispensables el cepillo y el hilo dental. Pero también pueden ser de utilidad los conocidos como irrigadores dentales, ya que hacen una limpieza más profunda.