Aquí va nuestro último post de este mes. Vamos a hablar de un aparatito que tendría que ser indispensable en cualquier casa. Se trata del irrigador bucal.
¿Qué es un irrigador bucal?
Un irrigador bucal sirve para realizar una higiene bucal que es complementaria al cepillado. Permite realizar una limpieza profunda en la cavidad bucal. Mediante la aplicación de un chorro de agua a alta presión se limpian tanto los dientes como las encías. Gracias al irrigador bucodental vamos a eliminar la placa bacteriana que se deposita en las zonas que son de peor acceso como pueden ser los bordes de las encías, las zonas interdentales o las superficies de los dientes. Gracias a él conseguiremos una sensación de limpieza y frescor máxima.
¿Quién puede utilizarlo?
Lo puede utilizar toda la familia. Pero es especialmente útil para personas con implantes dentales u ortodoncias. Ya que con este tipo de implantes es más difícil mantener una higiene bucal óptima. También es muy útil en aquellas personas que sufren de encías delicadas, ya que ayuda a disminuir la inflamación y el sangrado de las encías.
¿Cómo se utiliza?
El irrigador bucal puede utilizarse solo con agua o añadiéndole un poco de enjuague bucal diluido en el agua del aparato. Gracias a las diferentes boquillas de diferentes grados de expulsión de agua se puede adaptar a las necesidades de cada persona.
Si deseas más información sobre los irrigadores bucales, o necesitas consultarnos cualquier duda, no dudes en acudir a la farmacia y te atenderemos encantados.